Todo comenzó con un poco de lio

Hacía tiempo que quería completar mi formación académica que un día dejé sin acabar. Por unos motivos y otros iba pasando el tiempo y aunque intentaba informarme, en diferentes centros de mi ciudad, toda la información que me daban consistía en volver a clase en horario lectivo normal, pero para mí esta opción era imposible de compatibilizar con el trabajo y la familia. Así que dejé pasar el tiempo, esperando a que algún día pudiera cumplir estos horarios o las opciones formativas cambiaran.
Pero el año pasado, me propuse empezar a estudiar como fuera y volví a la carga. Estuve en el centro asociado de la UNED de mi localidad, y me dijeron que existía la posibilidad de presentarme por libre, así que hice la solicitud. Pero como la cosa tardaba y yo estaba ansiosa y temerosa al mismo tiempo por empezar, quería conseguir los temarios para poder ir echándoles un vistazo para ir poniéndome un poco al día, porque después de tanto tiempo, me iba a costar mucho.
El problema surgió porque el señor que estaba dando la información, no sabía aclararme las dudas que yo le planteaba, que eran muchas, y me dijo que entrara en la página de Educación Permanente, para solventarlas. Así fue, como empecé a indagar sobre el nuevo sistema del aula virtual y la educación on line. Pero como todo era muy nuevo, no conseguía una información veraz y segura al respecto y ya empezaba a decantarme por esta opción porque la veía más factible que la presentación a los exámenes por libre. Ante tanta incertidumbre y ya metidos en agosto, decidí no dejar pasar ni un día más y llame al a educación de Madrid, ellos me dijeron que hablara con Sevilla y de aquí me dieron varios números de teléfono, hasta que por fin, llegue al IES Los Viveros de Sevilla. No sé con quien hable allí, pero fueron muy amables y me solventaron todas las dudas.
Después de esto, ya solo tuve que esperar al plazo de septiembre y echar la solicitud y luego la matrícula. Tuve un poco de miedo de que no me la aceptaran por ser la segunda oportunidad para entrar. Estuve entrando en el portal de la Educación Permanente todos los días para ver si habían puesto las listas de las matrículas aceptadas, hasta que salieron y vi mi nombre. ¡No me lo podía creer, era de nuevo una estudiante! Tantos años queriendo empezar para acabar y ya podía empezar.
Comencé con muchas ganas y también con muchas incertidumbres, pero poco a poco, he ido cogiendo confianza y ahora estoy como en casa, es más es como adictivo. Todos los días necesito entrar en la plataforma, por muy cansada que esté, algo tengo que hacer, ir a la cafetería ver a los compañeros y profesores. Nunca lo hubiera pensado, pero tengo más contacto con todos ahora que cuando estaba en las clases presenciales. Es como una gran familia y cualquier problema que tienes enseguida aparece alguien que te da una solución.
Académicamente, estoy muy contenta de haberme decantado por esta nueva modalidad de educación on line en vez de la presentación por libre, porque con los horarios que manejo, mi tiempo para estudiar es normalmente a partir de las once o doce de la noche, y con este método de estudio puedo aguantar más tiempo despierta porque es muy ameno y entretenido, de otra manera, me quedaría dormida mucho antes y me hubiera costado bastante más.
Otra ventaja importante, es que puedes contar con profesores que te solucionen dudas o problemas que te surjan durante el estudio.
En definitiva, estoy muy contenta de estar en este grupo pionero en este tipo de enseñanza, porque al ser los primeros, hemos pagado un poco la novatada todos, profesores y estudiantes, pero también hemos tenido el privilegio de confirmar y hacer buena es nueva forma del estudio de Bachillerato, que en mi opinión ha sido todo un éxito.